La Paz, 1 de julio (RCM).- Fue una promesa y ahora se cumple. El descanso eterno de los seres queridos, de miles de familias alteñas, está garantizado en el Cementerio General Mercedario y atrás queda la incertidumbre por el riesgo de profanaciones y robos. El camposanto de El Alto está blindado con su muro perimetral, vigilado por cámaras de seguridad y con mejores servicios.
“Al igual que muchos, he vivido en carne propia los momentos difíciles que hemos superado en familia, lo hemos superado como hermanos que son. Tenemos nuestro muro perimetral que va a resguardar a nuestros seres queridos”, afirmó la alcaldesa Eva Copa.
En la primera media jornada, la concentración de personas en el camposanto tuvo un matiz diferente al vivido hace 10 meses. La buena convivencia de esta mañana reflejaba risas, alegría, música y emotivos abrazos de celebración.
Como en un gran cuartel, el muro metálico estrenado ahora bordea el perímetro del camposanto que entre paso y paso cuenta con más de 1.500 metros de longitud. La altura supera los 2,5 metros con las rejas que en la base tiene un muro de concreto, que hace difícil saltar al otro lado.
Los pormenores los explicó la Alcaldesa, luego de dos intervenciones de dirigentes del Distrito 4. Para el vecino que asistió, es seguro que constató el detalle técnico en un breve paseo dentro de las más de 10 hectáreas que posee la necrópolis de la urbe.
Eva Copa aseguró que el Cementerio General Mercedario será autosostenible. “Pedimos a ustedes, hermanos, que cuidemos estas obras que son de todos los alteños”, enfatizó. Y es así, entre cada pausa emitida en la alocución de la Alcaldesa, las floristas, gremiales y otros comerciantes aplaudieron en señal de acuerdo.
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