El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó el martes 9 de abril que más de 5.000 rifles AK-47, miles de ametralladoras, rifles de francotirador y misiles antitanques, incautados en ruta desde Irán a Yemen, fueron transferidos a las fuerzas armadas de Ucrania el pasado 4 de abril.
Un comunicado oficial indicó que los armamentos fueron confiscados por el Comando Central de EE.UU. y fuerzas navales asociadas de cuatro buques sin bandera en el Mar Arábigo, en ruta desde Irán a Yemen, donde grupos sancionados, incluido el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI), apoyan directamente al movimiento hutí.
También que se determinó que el armamento era principalmente de origen iraní, chino o ruso. El Departamento de Justicia solicitó a un tribunal estadounidense su decomiso y pasaron a ser propiedad de Estados Unidos en diciembre de 2023, tras lo cual fueron enviadas a Ucrania.
«Con esta transferencia de armas, el gobierno de Estados Unidos está desbaratando los esfuerzos desestabilizadores de Irán y apoyando la lucha de Ucrania contra la invasión brutal de Rusia», indicó el fiscal general, Merrick B. Garland.
De acuerdo con el comunicado, las armas fueron decomisadas en marzo de 2023, aunque el caso fue divulgado este martes, tras el envío a Ucrania.
«El decomiso plantea el tráfico ilícito de sistemas y componentes de armas convencionales por parte de entidades iraníes sancionadas que apoyan directamente la acción militar del movimiento huití en Yemen y la campaña de actividades terroristas del régimen iraní en toda la región», señaló Justicia.
Destacó que se realiza una investigación más amplia de la red de contrabando de armas iraní, con asistencia sustancial del Comando Central de las Fuerzas Navales de Estados Unidos para realizar las incautaciones.